RUTA 11: ¡El alcohol al volante mata!

Ante las últimas noticias sobre las pericias forenses realizadas al cuerpo del chofer del camión de la tragedia ocurrida en la Ruta 11 de Santa Fe, que indican un grado de alcohol en sangre de 1,6 gramos por litro, resultado que confirma que el mismo se encontraba altamente alcoholizado, y por ende IMPEDIDO PARA CONDUCIR, cabe destacar lo siguiente:

-Este tipo de situación es la resultante, entre otras cuestiones, de la falta de controles de alcoholemia sistemáticos, continuos y generalizados en las calles y rutas del país. Es necesario que las autoridades públicas asuman de una vez por todas su responsabilidad de hacer cumplir la ley para la protección de la vida en la vía pública. De haber existido controles de alcoholemia en la ruta, seguramente este conductor no habría podido seguir conduciendo y hoy estaría vivo al igual que todas sus víctimas. Más aún, probablemente no se habría atrevido a conducir en ese estado, de saber de la existencia de chequeos de alcohol.

EFECTOS DEL ALCOHOL EN EL CONDUCTOR (con 1,6 g/l)

(El alcohol es un tóxico depresor del sistema nervioso central)

* Genera una falsa sensación de seguridad, que lo predispone a excesos de velocidad y a todo tipo de violaciones a las normas de tránsito.

* Embota los sentidos, altera la percepción y disminuye la atención.

* Trastornos de la visión: -Encandilamiento (adaptación más lenta a los cambios luz-oscuridad)

* Dificultad para percibir los rojos (semáforos, luces de freno, traseras, etc.)

* Efecto “visión túnel”

* Apreciación equivocada de la velocidad y las distancias.

* Se alargan los tiempos de reacción (las respuestas y maniobras se hacen más lentas y/o torpes).

* Con más de 0,8g se producen serias dificultades para mantener la dirección y velocidades, la visión se vuelve borrosa y las acciones erráticas.

El límite máximo de alcohol tolerado en sangre por la ley es de: 0,5 g para conductores particulares, 0,2 g para conductores de motos y

0,0 g de alcohol para conductores profesionales.